Travian Magazine / Relatos

La Maravilla de Pepjesal

...Es noche cerrada cuando a lo lejos, alumbrada por miles de antorchas, divisamos la Maravilla de Pepjesal.

- Va a ser una fria noche general -comenta mi edecán.

- Fria y larga, amigo - le contesto, sin dejar de mirar los centelleos en la lejania.

Seguimos avanzando, con cierta premura. Bakanegra, el Señor de la Guerra de nuestra alianza, CNT, nos ha convocado a todos en la defensa de la Maravilla, pues las hordas de WMDK y Gande, han estado acechandola y me han informado mis batidores que a pocas horas un gran ejercito viene a destruir nuestra Maravilla y con ello, echar por tierra nuestro proyecto y nuestras posibilidades de una victoria final.

A medida que nos acercamos a la aldea, es mas notable el esfuerzo por levantar el colosal edificio. Las antorchas que veia a lo lejos, no eran un simple alumbrado. Miles de trabajadores, dia y noche, continuan su trabajo incesante. Hay prisa por ser los primeros, hay ganas de ser los ganadores.

Y sin embargo, no dejo de pensar en lo que me comunico uno de mis espias. Malas noticias tengo que dar a mis compañeros y ello, parece lastrar mi cabalgadura hasta el punto que la aldea de Pepjesal, parece alejarse en lugar de lo contrario.

- Mi señor Krugerhan, en las llanuras de Agua Roja, descansan dos grandes ejercitos. Uno de ellos reune miles de catapultas y el otro miles de arietes. Algo mas lejano, en el camino a la Roca de los Lamentos, un tercer ejercito se apresura en alcanzar a los otros dos.

- Buena informacion compañero, descansa y come alguna cosa, que te lo has ganado de sobra.

- Que se envien emisarios a todas las aldeas para que salgan de inmediato carros de cereal a la Maravilla y que los jefes de aldea convoquen a las tropas y se dirijan al Llano del Olvido donde nos reuniremos. Que dejen una guardia para la proteccion de las aldeas y que los emisarios salgan en batidas para evitar que nos sorprendan posibles acechos enemigos.

- Si Señor, dispongo todo lo necesario de inmediato - Respondio mi edecán con aire decidido.

El viento helado, nos empuja de lado y nos zarandea a todos los que vamos a lomos de nuestros caballos y hace mas dificultoso el avance de las tropas de a pie. La luna se levanta redonda y reluciente entre las Montañas del Giro Perpetuo y algunos lobos aullan en algunos valles inexplorados, de los que cuentan cientos de historias de incautos que se han aventurado a cruzarlos y de los cuales nadie ha vuelto a tener noticia.

No dejo de pensar en lo que se y mi mente se divide entre la premura por comunicarlo y el dolor por ser el portador de tan agrias noticias, algo que sin duda me lastra y me derrota. Quizas deberia mandar una avanzadilla para que avisara a Bakanegra, a Sanvi, al mismo Pepjesal.... Pero ¡No! Es mi responsabilidad como caudillo y no debo delegar esa responsabilidad en otros. Lo sabran a su tiempo y de mis propios labios.

Por fin llegamos al Llano del Olvido, donde mis tropas se reunen finalmente. Los jefes de las aldeas han cumplido mis ordenes sin vacilacion. Solo un par de aldeas mas alejadas aun no han llegado, pero en poco mas de una hora se reuniran con nosotros, pues se dislumbran a lo lejos hileras de antorchas serpenteantes, que me indican que en breve se uniran al grueso de las tropas y asi podremos reanudar la marcha hacia la aldea de Pepjesal.

Mi edecán ha dado ordenes de montar mi tienda, pero le he dicho que solo enciendan fuegos para calentar a las tropas. En cuanto lleguen el resto, continuaremos camino sin demora. Nos urge llegar cuanto antes a la Maravilla....

....Por fin veo la gran puerta de madera, fuertemente revestida, y un suspiro se escapa de mi boca, al tiempo que un pensamiento cruza mi mente y me reconforta, "Hemos llegado" "Por fin podre descargar la responsabilidad de mis noticias".

Skadjax se encuentra en la misma entrada, junto con el resto de sus tropas. Alzando los brazos, reclina su frente sobre su espada y me saluda.

- Por fin has llegado truhan. Tus tropas no parecen acostumbradas a tan largo camino... tus hombres parecen gordos y torpes, y tu caballo combea, pues has ganado bastante peso rufian. Esa buena vida en la retaguardia os esta pasando factura a ti, a tus tropas y sobre todo a tu caballo. Pobre animal...bajate ya de el o por los dioses que no creo que pueda llegar ni al abrevadero, jajajajaja.

Ahhh!!!! Este Skadjax, maldito tunante. Siempre con sus charadas y burlas. Pero, es un gran amigo y mejor combatiente. Y... no se le puede quitar un algo de razon... La verdad es que la vida en retaguardia, me ha procurado unos cuantos quilos de mas.

- Maldito mequetrefe, como baje de mi caballo, sabras lo que mi hacha sabe hacer- Le dije a Skadjax entre risas.

- Espera que me aparto, no sea que me caigas encima y me rompas unos cuantos huesos, jajajajaja....¡¡¡Por Tutatis!!! dadle fuelle al caballo de Krugerhan, que se lo ha ganado. Dadle heno fresco y abundante agua, que se recupere tras traernos semejante carga, jajajajaja.

- Si no fuera por lo que te aprecio, jajajaja... maldito galo borracho, jajajaja....Venga un abrazo, amigo mio.

- ¿Es verdad lo que dicen, compañero? - Me pregunto, al tiempo que me ayudaba a bajar del caballo, sin cesar en sus payasadas y aspavientos.

- ¿Y que es lo que dicen, amigo? - Le respondi, sin querer anunciarle lo que sabia, sin antes hablar con Bakanegra y los demas.

- Dicen que hay tres ejercitos cargados de maquinaria pesada, esperando en las llanuras de Agua Roja. Dicen que vienen a por nuestra maravilla. Dicen que el consejo de WMDK y Gande, han decidido no darnos tregua y quieren reducirnos a cenizas. Nos odian, nos desprecian, pero sobre todo, temen nuestra pericia en el campo de batalla. Nos consideran sus rivales con mas opciones y vienen a por nosotros, subestimando al resto de grandes alianzas....

- Algo se sobre ello compañero Skadjax, pero permiteme que hable antes con Bakanegra, Sanvi y los demas. Dejame que guarde silencio hasta que pueda comunicarles lo que conozco y luego, cerca del fuego y con una jarra de cerveza caliente, hablaremos sobre todo.

- Tu silencio, me da a entender que hay un mucho de cierto, amigo. Pero vamos, te acompañare hasta la tienda de Bakanegra y luego tomaremos esa cerveza.

- Gracias amigo, tu siempre tan discreto y ¡¡¡Por Dios!!! ¿que es ese olor insufrible?

- Perdona Krugerhan, es el hagish que se revuelve en mi estomago, jajajajaja.

La mayoria estaban con sus hombres, procurando tenerlo todo preparado para la cercana batalla por la existencia de nuestra Maravilla. Alli estaba el pelirrojo Txakal, sentado al fuego con Tossyo, bullcan y Kaisercheto. Mas alla estaba Yosan, el galo, alentando a sus falanges. Junto a la herreria, en dos grandes corros, se sentaban Txibi, zah, Sarabris, ranarene, torrespa, asturianu, humor el apodado amarillo, pues su piel era palida y brillante como el cobre, joancho, aquiles, y otros muchos mas. Algunos aun estaban de camino, apurando el paso para obedecer la llamada de nuestro Señor de la Guerra.

- Bueno ahi la tienes, buscame luego por la cantina y tomaremos esa cerveza que me prometiste - Y dijo esto tras dejarme frente a la tienda de bakanegra y tras darme un cariñoso mamporro en la espalda.

Los guardias me anunciaron. Al traspasar la lona que hacia las veces de puerta, los vi alli de espaldas, junto a una larga tabla con fuertes caballetes, discutiendo sobre un plano de la ciudad, las tacticas a seguir.

Alli estaban Bakanegra, Pepjesal, Sarkhan, Sanvi y Orzo. Bakanegra, al oir mis pasos entrando en la tienda, se giro y se dirigio a estrecharme la mano, al tiempo que me saludaba.

- Bienvenido Krugerhan ¿ Me traes muchos refuerzos?.... Me dijo, tras dejar mi mano y mirandome de arriba abajo- . Tranquilo, sabemos lo que vienes a decirnos. Conocemos los pormenores de los tres ejercitos acampados en en las llanuras de Agua Roja. Y no te sorprendas, tenemos otras fuentes ademas de la tuya. No podemos arriesgarnos ¿ lo entiendes, verdad?

- Oh si mi señor, pero crei que urgia la informacion, y, aunque he considerado la idea de mandar una avanzadilla, he preferido informaros personalmente.

- Haz hecho bien en no mandarla. Sabemos que hay tropas enemigas, esperando oportunidades como esa, para hacerse con informacion importante. Nos vigilan, y nosotros a ellos. Sabemos que vendran, eso es seguro. Lo que nos preocupa es poder detener tanta maquinaria sin que destrocen nuestras murallas y peor aun, reduzcan a cenizas nuestra Maravilla. Va a ser dificil y complicado detenerlos, pero con la ayuda de Marte, de Odin y de Tutatis, lo conseguiremos.

- Sin duda, mi señor. Mis lanceros , mis paladines y yo mismo, estaremos dispuestos a dejarnos la piel en el campo de batalla para conseguirlo.

- No me cabe duda de ello, amigo, no me cabe duda de ello. Que el poder del acero te acompañe al alba, pues con toda seguridad sera el momento en que recibamos la embestida. Descansad tu y tus hombres y prepararos para ese momento. En invierno, anochece mas pronto y el frio puede doblegar al mas duro de los caballeros. Calienta tu cuerpo, tu estomago y afila tu espada. La batalla esta cerca y sin duda, sera una dura y decisiva batalla.

Salgo de la tienda, tras haber saludado a los demas , y, como no, haber recibido mas de un comentario jocoso acerca de esa tripa que he traido... hay quien me ha preguntado si llevaba alli el escudo, que si era una nueva tactica de combate.... Malditos bastardos, jajajaja, saben lo que les aprecio y ese aprecio hace que se ceben aun mas.

Me dirijo hacia la cantina, saludando a unos y a otros, teniendo que oir, una y otra vez, chacharas sobre mi barriga. Poco antes de entrar en la cantina, me detengo y me giro. Necesito contemplar a todas esas tropas, no se si por reconfortar mi espiritu ante la batalla inminente, o para observar a esos hombres, lanceros, falanges, pretorianos y legionarios, druidas, imperatoris, paladines.... ¿Cuanta sangre nos contara la defensa de nuestra Maravilla? Mucha, sin duda.

Y alli estan ellos, sonriendo, cantando, bailando, preparando algunos sus armas , otros durmiendo, la mayoria bebiendo....En el fondo todos saben lo que sucedera en poco tiempo, seguramente muchos de ellos no lleguen a ver el sol de mediodia, y sin embargo, ahi estan, despreocupados...

- Ya habra tiempo para morir, compañero. Ahora tragate esta cerveza y hablemos - Me dice Skadjax tras arrearme otro de esos manotazos suyos que te ponian la espalda recta y entregandome una jarra de cerveza de miel, bien caliente, como el sabe que a mi me gusta.

.... Una mano pesada en mi hombro, me despierta. Me he quedado dormido junto al fuego. Skadjax yace boca arriba roncando como un cerdo, algo que le es innato.

- Señor, la tienda esta preparada. ¿Deseais acostaros un poco? ¿ comer alguna cosa? - Me dice mi edecan, tras dejar de presionar mi hombro.

- Si vamos, quiero acostarme un poco. Estoy algo fatigado por las prisas.

- Apoyese en mi, señor. Ya deberia recordar lo mal que le sienta la cerveza de miel caliente.

.... Estoy echado, en mi tienda. No consigo dormir. En el exterior, se oye mucho movimiento.

Intranquilo, me dirijo al exterior de la tienda, no vayan a empezar sin mi y mis tropas.

Son los rezagados. Por la gran puerta de madera, van desfilando miles de soldados. Entre ellos se abre paso Orzo, montado en su caballo y se acerca a mi con premura.

- Prepara ya a tus hombres germano. Los ejercitos enemigos se encuentran a solo unas pocas leguas. En el horizonte ya empieza a verse la claridad del nuevo dia. No tardaran en atacarnos.

- Enseguida le doy ordenes a mi edecán para que inicie los preparativos, mi señor Orzo.

- Dirigiros a la muralla sur, preveemos que el ataque llegara por esa zona.

- ¿Pero saldremos a enfrentarlos o esperaremos en la Maravilla? Lo digo, porque si esperamos aqui con las catapultas no dejaran piedra sobre piedra. - Le dije a Orzo que me miraba con cierto desdén.

- Y si salimos a destruir esas catapultas, nos encontraremos a merced de sus tropas, ademas de los miles de arietes que seran la avanzadilla y que impediran nuestro avance.

- Eso es cierto, sin duda que lo es, pero ¿Que haremos entonces? -Le lance a Orzo la pregunta, esperando algun milagro.

- Pues ¿Que vamos a hacer, insensato? Defendernos como podamos, hasta el fin - Me dijo esta vez con malas maneras.

- Pues ahi estare yo y mis tropas, para lo que dispongais. - Le dije yo, con aspavientos.

- Asi lo esperamos. - Y diciendo esto, espoleo su caballo y fue en busca de los que estaban cerca de la cantina, para darles nuevas ordenes.

.... Aqui, estamos, en la muralla sur como me indico Orzo. Mis hombres y yo mismo estamos a la espera de que las hordas de WMDK y Gande, caigan sobre nosotros en cualquier momento.

Amanece y el cielo aparece de rojo pintado. Mal presagio. Mucha sangre sera vertida en el dia de hoy. Esperemos que consigamos salvar nuestra maravilla, pues de lo contrario, esto seria el fin para todos nosotros, pues mucho ha sido el esfuerzo para levantar esta Maravilla y si sucumbiera, dificilmente podriamos rehacernos. Hay que resistir, hay que golpear al enemigo, hay que ser fuertes hasta el final...

.... Las primeras rocas empiezan a caer sobre nosotros. Cada vez son mas y mas. Los arietes enemigos han derrumbado la muralla este y Orzo nos ordena que carguemos contra ellos rapidamente.

Asi lo hacemos, y junto con otros compañeros los masacramos. Bakanegra, nos hace señal que avancemos por el hueco que se ha abierto en la muralla norte. Vamos a enfrentarnos a dos ejercitos, el que protege las miles de catapultas y el que se encontraba cercano a la Roca de los Lamentos que irrumpia en el escenario de la batalla.

Tenemos que conseguir destruir esas catapultas que estan destrozando nuestra Maravilla, pero miles de tropas a pie y a caballo se interponen entre nosotros.

La batalla es sangrienta. Miles de cuerpos de hombres y caballos yacen inertes en el campo de batalla, pisoteados por mas hombres y mas caballos que luchan entre si por la victoria final. De fondo incesantemente el ruido sordo de las miles de piedras cayendo sobre la ciudad y sobre la Maravilla.

... Tras varias horas de lucha, conseguimos hacer brecha en las tropas enemigas y empezamos a destruir las catapultas, que mientras tanto, ya han hecho su trabajo y han derrumbado la Maravilla, la muralla, un almacen y un granero.

Finalmente la aniquilacion enemiga es total, ni un solo hombre, ni una sola de las maquinarias de guerra de los tres ejercitos que han llegado hasta aqui, ha salido indemne. Pero eso no importa. Han dado su vida por conseguir el objetivo que se les asigno y lo han conseguido. Nos han derrotado porque al destruir nuestra Maravilla nos han privado de la victoria final...

Bakanegra nos felicita, a lomos de su caballo, y nos arenga a no darnos por vencidos, a seguir luchando por la victoria final.

Pero en el fondo todos sabemos lo mismo. Skadjax esta muy serio, mas de lo que en el es natural. Me mira y menea la cabeza, y me dice en un susurro: "Tardamos demasiado. Esas malditas catapultas nos han derrotado. Hemos ganado la batalla, pero hemos perdido a la vez". Y tras abrazarme, subio a su caballo y dando señales a los pocos hombres que habian sobrevivido a la batalla, empezo a alejarse de la destruccion.

....Estoy sentado, en unas piedras de la muralla, observando el campo de batalla. cientos de hombres, recogen los soldados enemigos y los apilan en grandes montones. Numerosas carretas, andan alli y aqui, buscando a nuestros hombres. Algunos yacen heridos y los galenos se apresuran en atender a los mas enteros. Otros carros, cargan escudos, corazas, cascos, espadas y lanzas.

El sol en lo alto del cielo calienta la tierra. Algunos buitres vuelan en circulos sobre la tierra ensangrentada. Una mano se apoya en mi hombro y oigo una voz familiar.

- Señor, todo esta preparado para la partida. Los heridos permaneceran aqui, junto con varios miles de lanceros. El resto esperamos vuestras ordenes para emprender el retorno a casa. - Me dice mi edecán con el rostro serio y con trazas de tristeza.

- Bien, partamos ya entonces, es hora de volver a nuestro reino. Esperadme unos instantes que me despida de Bakanegra y los demas y saldremos en camino.

...Tras despedirme de Bakanegra, Sarkhan, Orzo y los demas, subo a lomos de mi caballo y poniendome al frente de los restos de mi ejercito, doy orden de iniciar la marcha.

Es curioso, vuelvo a sentir esa sensacion de pesar, aquella sensacion que sentia al acercarme a la Maravilla, pero esta vez, es distinta. Esa sensacion es por marcharme, esa sensacion es la de la derrota. No puedo resistirlo mas, y deteniendo mi caballo, me giro para verificar que es cierto. Nuestra Maravilla a sucumbido. Donde hace unas pocas horas se levantaba orgullosa nuestra Maravilla, ahora solo hay ruinas.

Siento mirando los restos, una gran pena, por los caidos, por los que han trabajado tanto por conseguir la victoria, y sin embargo, un pensamiento no hace otra cosa que rondarme la cabeza "Volveremos. Volveremos y por ellos, conseguiremos la victoria final. Quizas no sea ahora, quizas no sea mañana, pero regresaremos y obtendremos el triunfo que hoy se nos ha negado". Y girando la cabeza, espoleo a mi caballo y me coloco al frente de mis tropas.

..... Ha llegado un emisario que me ha traido noticias del frente. Parece ser que Renegados, ha conseguido llevar hasta el final su Maravilla y ha conseguido la victoria final.

Esta noticia me alegra. Aunque hubiera preferido que la victoria hubiera sido nuestra por lo menos no han vencido los que nos privaron de la victoria final.

Ahora es hora de partir amigos. Nuevas tierras por descubrir nos esperan, pues nuestra labor aqui ha terminado. Dicen que hay tierras al norte, con grandes valles de cereal, ideales para crear nuevas tribus. Pero eso ya es otra historia, que ahora no os voy a contar....

Krugerhan